Bocaditos de Roscón de Reyes

Si hay un dulce que me guste de las navidades es el Roscón de Reyes. Podría decir, sin duda alguna, que es mi favorito, y éste que os traemos este año, creo que es el mejor que hemos hecho hasta el momento, y es que no está solo rico el roscón, es que el relleno que hemos preparado es una delicia.

Pero antes de irnos a por la receta, dejadme daros las gracias, gracias por este 2021, por acompañarnos en cada receta, en cada entrada. Por estar ahí, algunos estáis desde prácticamente nuestros comienzos, hace 10 años, otros lleváis poquito, pero a todos, por igual, quiero agradecer vuestro cariño y todos y cada uno de vuestros comentarios.

Ojalá este año nuevo os traiga sólo cosas buenas, se cumplan vuestros deseos, y sobre todo, seáis felices. Ojalá este 2022 nos deje vernos por aquí, nos deje seguir compartiendo ricas recetas y buenos momentos.

Os desearía un feliz año nuevo, ¡pero prefiero desearos una feliz vida!

Y ahora sí, ¿me acompañáis a probar estos bocaditos de Rosón de Reyes?

Vamos a necesitar:

250gr. de harina de fuerza / 125ml. de leche / 12gr. de levadura fresca de panadería / 100gr. de azúcar / 1 huevo grande / Ralladura de naranja / Ralladura de limón / 35gr. de mantequilla sin sal / 2gr. de sal / Avellanas picadas / Azúcar / Agua

Para el relleno:

250ml. de nata para montar / 4 cucharadas soperas de crema de leche y avellanas

Empezaremos por el roscón, para ello calentamos la leche ligeramente hasta dejarla tibia y desmenuzamos encima la levadura fresca, añadimos una pizca de azúcar y una cucharada de harina. Mezclamos, tapamos con un paño y dejamos fermentar media hora.

Por otro lado, en un bol amplio y hondo, añadimos la harina de fuerza y la sal. Formamos un hueco en el centro y añadimos la mitad del azúcar, el fermento y el huevo, del cual, reservaremos una cucharada para pintar los roscones. Mezclamos bien antes de agregar la mantequilla que estará a temperatura ambiente, y amasamos dentro del mismo recipiente hasta incorporar. Tapamos con un paño y dejamos reposar 15-20 minutos.

Pasado este tiempo amasamos con energía. Si hiciese falta, se puede añadir un poco de harina, aunque es mejor intentar domar la masa para tener unos bollos más tiernos. Al cabo de unos minutos de amasado se volverá más maleable y elástica.

Formamos una bola, colocamos en un recipiente engrasado y tapamos. Dejamos levar un par de horas, hasta que doble su tamaño. Desgasificamos, dividimos en pequeñas porciones, nosotras hemos hecho 8 de bocado y 4 más grandecitas, boleamos. Nos engrasamos las manos para que sea más fácil la tarea. Colocamos en una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado, tapamos con un paño y dejamos reposar nuevamente hasta que doblen su tamaño.

Añadimos una pizca de leche a la cucharadita de huevo reservada y pintamos con ello cada bolita de masa. Añadimos un poco de la avellana picada, y prepararemos nuestra azúcar, que es tan sencillo como añadirle unas gotas de agua y hacer como un azúcar perlado. Ponemos por arriba y horneamos, precalentado a 180 ºC con calor arriba y abajo, durante 10-12 minutos o hasta que estén dorados. Si hacéis dos tamaños, tendréis que hornearlos en tandas diferentes para que los pequeños no queden secos.

Cuando los bocaditos de roscón estén fríos, los abrimos por la mitad con mucho cuidado usando un cuchillo de sierra y rellenamos.

Nuestro relleno es tan sencillo como añadir a la nata las cuatro cucharadas de crema de leche y avellanas y batir hasta montar.

Son unos bocaditos de Roscón maravillosos, y estamos seguras de que os van a encantar.

¡Espero que os haya gustado!

Nos vemos pronto, ¡gracias por estar ahí!

¡Y recordad que nos podéis seguir por las redes!

¡Sed felices!